Hará un par de meses leí una noticia
sobre un joven americano que decidió, de un día para otro, dejar de comer para empezar
a nutrirse. El protagonista de todo esto se llama Rob Rhinehart, programador de Atlanta y su experimento
consistía básicamente en conocer cuales eran los nutrientes esenciales de
nuestra dieta. Conocer aquellos que realmente nos aportan energía y crear un
brebaje que los contuviera todos. A partir de ahora ese sería su principal
sustento. El objetivo de Rob no era perder peso, era obtener energía y
poder mantenerla.
En su blog dice
La comida es el combustible fósil de la energía humana. Es un enorme mercado lleno de residuos,
regulaciones, graves implicaciones geopolíticas.
Dependemos en gran medida de ella. En
unos países la gente muere por ser obesa y en otros de hambre. La
comida cuesta tiempo y esfuerzo para su
preparación, para limpiar lo que has ensuciado y obviamente dinero a la hora de
comprarla.
Investigó
todas las sustancias que el cuerpo necesita
para sobrevivir, además de otros extras
que han demostrado ser beneficiosos. A
continuación los compró todos ellos en forma química. Los primeros días no salió a pedir de boca, lo que comportó
que la deficiencia de unos u otros nutrientes tuviera unos efectos
determinados. Se dio cuenta que los
niveles de hierro no eran los adecuados, así que modificó su formula y siguió
para adelante.
Tras su
segundo mes con Soylent, comprobó que debía aumentar el aporte calórico
modificando algunos de sus componentes. Si sentís curiosidad sobre los
nutrientes que toma y en qué proporciones los podéis consultar en su blog.
Ahora
lleva tres meses y lo que nos cuenta en su blog, es básicamente lo de cada mes.
Cada mes que pasa va mejorando su fórmula ante la aparición de determinados
síntomas, de momento está en su versión nº7 (nada negativo, solo que no son los
adecuados si lo que se quiere obtener es un rendimiento del 100%). En su última
versión se ha centrado en modificar su fórmula para tratar de obtener un mayor
rendimiento mental antes que físico. Un alto porcentaje de personas del
“primer” mundo moderno ya no realizan labores que requieren una gran
fortaleza física. Todo se ha
automatizado. Necesitamos la
fuerza mental. Necesitamos
creatividad, paciencia, disciplina y humildad.
Lo efectos
beneficiosos del experimento son visibles, piel más sana, se encuentra menos
fatigado, tiene más agilidad mental, es capaz de hacer muchas más cosas, ha
mejorado su capacidad de apreciar los sabores, ha perdido grasa y aumentado
músculo.
Por
curioso que parezca, cuenta Rob no siente la necesidad de comer comida
“solida”. Eso de “cómo me apetecería comerme ahora un buen solomillo”. Pues no.
Todo
esto a algunos les parecerá que a Rob se la ha ido la pinza, pero este chico lo
tiene todo bastante controlado. Se hace análisis de sangre regularmente,
electrocardiogramas, análisis del sueño, de presión, de niveles de azúcar… e
increíblemente, muestra unos resultados magníficos. Algunos decían ¡es
imposible que sepas los nutrientes esenciales que necesita tu cuerpo, esto que
haces no puede ser bueno! Claaaaroo, cuando vivía a base de burritos y fideos
chinos eso era lo bueno.
Sobre lo
que Rob decía al principio sobre que la comida era una fuente de tiempo y
dinero. Tras empezar su andadura, ha ahorrado en tiempo y dinero. Ese ahorro de
tiempo lo utiliza para hacer otras cosas que él encuentra más provechosas y el
ahorro de dinero lo utiliza para permitirse el capricho de ir a buenos
restaurantes a comer preparada con ingredientes de primera (hace especial énfasis
en el sushi, ahora lo saborea infinitamente más). Recordemos que Rob vive en
los EE.UU., por lo que su estilo de vida no sería lo que viene siendo muy
saludable. Reflexiona sobre lo esclava que es la cocina en un mundo tan
masculinizado como en el que vivimos. El principal perjudicado ha sido el sexo
femenino. Porque seamos realistas, ¿quienes eran en el pasado las que se
encargaban de comprar, preparar y recoger todo lo que comíamos?
Pero
todo no puede ser maravilloso. Una parte de la comida es su componente
socializador. Llevar una rutina como la suya a rajatabla no es recomendable. Lo
que él recomienda y hace, es no decir que no a una buena cerveza tras el
trabajo o a una reconfortante cena/comida con su novia o amigos. Eso si,
durante la semana sigue su rito.
Ahora,
pensemos en todo lo que esto puede aportar al mundo. Una alimentación que
cuesta menos de 2$ al día, que tiene todos los nutrientes esenciales de una
dieta, que no caduca durante meses,
no requiere refrigeración, es fácil de transportar, es barata y ecológica
de producir, no contiene pesticidas,
hormonas, ni conservantes, es facilísima de preparar, incluso sin necesidad
de una fuente de calor (aunque se necesita agua
limpia ), no perjudica ni a
animales ni plantas yyyyy reduce drásticamente los requisitos de saneamiento, porque si no comes, no vas al
váter. A días de hoy está pensando en iniciar una campaña en Kickstarter para
comercializar su propuesta y tener más ingresos para profundizar en su
investigación.
En su
último post concluye con este pensamiento:
El mundo ha cambiado. No vivimos como nuestros antepasados. No trabajamos como ellos, no hablamos como ellos, no pensamos como ellos, no
viajamos como ellos, o pelear como ellos. Entonces ¿Por qué diablos íbamos a querer comer como ellos? Prácticamente
todo ha mejorado en el último siglo,
pero la comida ha empeorado. Esto se
debe a que la alimentación es un paraíso
para los reaccionarios. Si
podemos hacer que los aparatos eléctricos sean
más baratos y más potentes, sin duda podemos hacer que los alimentos sean mejores, más baratos y nutritivos que cualquier cosa que existe de forma natural. En el pasado, la comida era una cuestión de supervivencia.
Ahora podemos tratar de crear algo ideal.
Así que,
¿qué creéis? En una escala del 1 al 100, ¿qué importancia le daríais a la
comida? ¿mejoraríamos si cambiáramos nuestra manera de entender la comida?
¿realmente seriamos capaces de alimentarnos como Rob propone? ¿es viable
extenderlo o llevarlo a países donde existe esa carestía de alimentos o
subyacen intereses (gobiernos) que harán que una idea así nunca salga a la luz?
Cierto,la idea es buena para paliar el hambre y si es barata genial pero para mi que no se extienda porqué me gusta comer y más con los ojos que con la boca....arriba los pinchos,tapas y demás platos que no se si serán nutritivos pero están bien buenos!!!
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